El casco antiguo de Icod de los Vinos, en el que se encuentra el Hotel Emblemático San Agustín, está declarado como “Bien de Interés Cultural” debido a los importantes monumentos que los visitantes pueden encontrar en sus calles adoquinadas. Entre ellos podemos destacar la Iglesia de San Marcos (de principios del siglo XVI, con importantes tallas y reliquias), el Convento de San Francisco, la Casa y la Plaza de Lorenzo-Cáceres y el famoso Drago Milenario (declarado Monumento Nacional en 1917).

Por otro lado, la Playa de San Marcos, de arena negra y protegida por una bahía, constituye el lugar ideal para relajarse al sol y al rugir de las olas, a sólo tres kilómetros del Hotel, en la que se puede degustar pescado fresco gracias al pequeño puerto pesquero desde el cual parten las embarcaciones todas las mañanas.

Además, probablemente sea desde Icod de los Vinos desde donde se pueden apreciar las mejores vistas del Teide, que se alza imponente y majestuoso a las espaldas de la ciudad.

Un paseo permitirá a los visitantes descubrir pequeños rincones así como los secretos y encantos de esta región, o simplemente tomarse un café en la plaza principal de la ciudad.